¡EXCURSIÓN AL PEDRAFORCA!!

Día 26 de Agosto de 2015, miércoles

¡EXCURSIÓN AL PEDRAFORCA!!

Tenedor de 2 dientes

El Cim!!

Organizada por Andrés, salimos esta mañana a las 07:00h de la BP. : Adrià Bernabé; Marc, (su hijo); Paco Jardinero; Juan García; Sandra (su hija); Rafa García; Carlos, (su hijo); Andrés y yo. ¡Nueve Excursionistas!!

Nos hemos llevado dos coches: Adrià que tiene un todoterreno, creo que de la marca Opel, y yo el mío. Su coche lo ha llevado Marc, con Adrià, Paco Jardinero, Rafa y Marc de chófer. En el mío hemos ido: Andrés, Juan, Carlos, Sandra y yo.

Nos hemos ido por el Eix hasta Manresa, después hemos tomado la autovía que va de Barcelona al Túnel del Cadí y antes de llegar al mismo, hemos girado a la izquierda, hacia Saldes. A la salida del pueblo, sale una carretera pequeña, muy estrecha que va a un aparcamiento y mirador, debajo del Refugi “Lluís Estasen”. A partir del aparcamiento, la carretera, se convierte en Pista Forestal que va a la Sierra del Cadí.

Los coches los hemos dejado en el aparcamiento y nos hemos cambiado. Delante de donde yo he dejado el coche, sale un camino que empieza con una escalera de troncos, por donde los nueve hemos acometido esta excursión, para muchos como yo, épica.

En poco rato, hemos llegado al Refugi d’Estasen. Andrés ha llenado agua en una fuente que hay delante, en el prado y Adrià me ha convencido a mí para que tomemos un café en el bar. Rafa se ha unido, pero rápido hemos salido hacia arriba, porque Andrés ya estaba nervioso.

Inicialmente, la ruta ha estado bien. Subidas suaves, buena sombra de los pinos y buen ambiente. Teníamos ánimos y expectación, porque lo que teníamos claro, era que había que subir arriba de todo y un momento u otro, cambiaría la pendiente. Nosotros mirábamos a nuestra izquierda y vimos la montaña blanca y pelada y veíamos que el camino, nos alejaba de ella, pero tarde o temprano, aquello se complicaría.

Cuando llevábamos andando unos veinte minutos, Sandra, que por cierto, hoy es su doceavo cumpleaños, le dice a su padre que no se encuentra muy bien y prefiere quedarse allá abajo. Como Juan ha pasado una semana de baja y tampoco tiene muchas ganas de machacarse, se ha quedado con ella. Así que hemos seguido el resto, subiendo y refunfuñando por la emboscada que Andrés nos ha tendido, llevándonos a esta excursión, que todos estábamos deseando hacer y que tantas expectativas nos ha creado, y satisfacción, claro!

Finalmente, hemos llegado al Coll del Verdet, en la cara Noroeste del Pedraforca y final del ascenso por camino de bosque podríamos decir. (Coll del verdet: 2.255,00 mts.).

A partir de allí, venía lo más peligroso, pero también lo más divertido, según los montañeros especializados. La verdad es que yo, también lo he encontrado así. Es donde te enfrentas de verdad a la montaña, has de grimpar, sientes el peligro, te sube la adrenalina y te reconforta vencer el riesgo. Cuando llegas al Cim y observas el paisaje tan maravilloso, te sientes muy satisfecho, es inexplicable!!

También reconozco, que el riesgo es muy grande, y no me gustaría que un día, por conseguir un objetivo, aunque sea reconfortante, me ocurriera un accidente tan espectacular. Tampoco me gustaría que me ocurriera uno en la carretera, cosa más absurda y que tenemos mucho más riesgo de sufrir.

La sensación de haber subido a un sitio así, por tus propios medios, la vista tan espectacular, la camaradería con los compañeros, la evasión del estrés cotidiano, etc. supongo que es el gusanillo que engancha a tanta gente que están envenenados con estos deportes, tan arriesgados.

Volviendo hacia atrás, en el Coll del Verdet hemos hecho una “parada técnica”, (eso me ha salido muy bien), parada técnica. Quiero decir que no ha sido como las que hacemos, cada vez que los que van delante, te esperan, lógicamente descansando, y cuando llegas tú, a punto de que el corazón se te salga por la calva. Te dicen: - Vamos, que ya queda poco. ¡Veis como no era tan difícil!. ¡Joder!! Te dan unas ganas de darles con el palo!

Bueno, esta vez no ha sido así, ¡Soy un exagerado!! Debe ser porque éramos mayoría los que llevábamos el corazón en el cogote.

La parada ha sido de 10 ó 15 minutos, como mínimo. Hemos comido algo, bebido, y más cosas... (algunos).

Desde allí, hemos acometido la Carena, ya pelada, hacia el Cim que nos quedaba al Este.

El tema de “Grimpar”, cosa que a mí se me antojaba, como lo de ponerse “grampones" y escalar, no ha sido así, pero más o menos. Lo que pasa es que la ruta está muy bien marcada y supongo que también debe estar arreglada. De todas formas, considero que no ha sido demasiado difícil. El secreto está en: no mirar hacia abajo, concentrarse en la seguridad y no ponerse nervioso.

Hemos encontrado una familia, que llevaban dos críos. El chico, no debía tener ni 10 años. Estaban en el Cim, (Pollegó Superior= 2.506 mts). Subir no lo hemos visto, pero bajar, iba con su padre, delante y lo tenía que esperar.

Arriba de todo, hemos parado lo justo para hacernos 2 ó 3 fotos, ver la magnífica panorámica, (había demasiada gente) y bajar hasta un lugar, donde pudiéramos sentarnos tranquilamente a comer. Justo iniciar la bajada, fuera del camino, en la ladera mirando a Sur, sin viento, nos hemos dispersado un poco y hemos comido, comentando que lo peor, ya estaba hecho.

La peculiaridad de esta montaña, emblemática de Catalunya, viene dada por sus dos agujas, (Pollegons) y el Coll de entre ambas, (La Enforcadura). Vista desde el Sureste, que ha sido por donde nosotros hemos llegado, después de una curva de la carretera, la hemos visto, ¡Majestuosa!, emerger desde el paisaje verde de los valles y montes del Pre-pirineo, un enorme tenedor blanco, con solo dos dientes hacia arriba.

 Los dos Pollegons, tienen una altura de: 2506 mts. el Superior y  2445 mts. el Inferior. El Coll central, La Enforcadura, 2356 mts.  Como la capa de la Enforcadura, és más blanda que la de los  Pollegons, se erosiona más y rápido, debido al hielo que resquebraja  la piedra y ultimamente, por la acción humana, que también acelera  la erosión. Esto ha creado las dos famosas Tarteras, (Norte y Sur).

La estructura geológica de esta montaña, es excepcional. El plegamiento Pirenaico, se formó con la colisión de las placas tectónicas, Ibérica y Europea, hace, entre 69 y 75 millones de años. En cambio la formación del Pedraforca, se cree que hace entre 25 y 33 millones de años, dándose la curiosidad que unas capas más antiguas y blandas, como son las de la Enforcadura, que en ese tiempo, debían estar a la misma altura que los dos pollegons, con el tiempo, se han ido erosionando más rápido y ha originado esa Forca que le confiere su Originalidad.

Mi duda surge: Si las montañas nuevas se formaron por plegamientos, relativamente jóvenes: Himalaya, Alpes, Pirineos, etc. y siempre por movimientos de las placas tectónicas. ¿Cómo surgió el Pedraforca, con esa altura tan considerable, en esa época tan reciente y con los tres tipos de materiales diferentes?: Capa Superior del Pedraforca; Capa de la Enforcadura y Capa Inferior del Pedraforca.

Los geólogos hablan de tres capas de corrimiento. Yo no tengo ni idea, pero al parecer, tiene algo que ver con los “Singles” que se ven en el pre-pirineo, tipo Bassegoda y así.

Situándonos todos los excursionistas, en el Coll de la Enforcadura, bajamos por la Tartera Norte, que llega hasta la carretera donde teníamos el coche, pero casi nadie llega abajo porque queda a medio camino entre el aparcamiento y Saldes.

Según nos ha contado Andrés, esta tartera está muy deteriorada, por la cantidad de turistas que subimos y en los descensos, empujamos las piedras hacia abajo, quedando solo una capa de grava, tipo machaca, con poco grueso de la misma, en muchos trozos se ve la tierra. Con la pendiente tan grande que tiene el terreno, resbala mucho y siempre estás en el suelo. En cambio, cuando hay muchas piedras, (sobre todo de 10 ó 12 cms.), puedes bajar saltando y corriendo, que no te caes.

Lo malo de los principiantes, es que el cansancio que ya acumulas, la falta de experiencia, todo junto, hace que te caigas más y te puedes hacer daño. Carlos, el hijo de Rafa, se había hecho daño en una rodilla subiendo y han tardado en bajar un montón. A media Tartera, o un poco más, por la izquierda sale un camino, por donde volvimos al Refugi d’Estasen.

Finalmente, llegamos todos a los coches, donde ya nos esperaban, Juan y Sandra. Nos cambiamos e iniciamos el regreso, pasando por Saldes, donde nos paramos para tomar una cerveza en un bar.

Llegamos a la BP. de Sant Feliu, a las 06:00h de la tarde. Hicimos las cuentas de la gasolina y las cervezas, y tocamos a 10 €. Cada uno!
¡Un día magnífico y barato!!